¿Qué es la crema de CBD y cómo se clasifica?
El CBD es uno de los componentes naturales que se encuentran en las plantas de cannabis, y que tiene múltiples beneficios para la salud y el bienestar. El CBD se puede consumir de diferentes formas, entre ellas, mediante productos tópicos como las cremas. Las cremas de CBD son productos cosméticos que contienen CBD como ingrediente principal, y que se aplican sobre la piel para aliviar dolores, inflamaciones y otras afecciones cutáneas.
Las cremas de CBD se pueden diferenciar según su textura y composición, en tres categorías principales:
- Loción corporal: son similares a las cremas hidratantes que usamos habitualmente, pero con una mayor concentración de CBD. Suelen tener una textura suave y ligera, y se absorben rápidamente por la piel.
- Bálsamos: son una combinación de cremas y aceites, que tienen una textura más fluida y untuosa. Suelen contener otros aceites esenciales o vegetales que potencian los efectos del CBD.
- Aceite corporal de CBD: son productos líquidos y oleosos, que se aplican mediante un masaje sobre la piel. Tienen una mayor duración y penetración, pero requieren más tiempo para su absorción.
El tipo de CBD que se utiliza para elaborar las cremas suele ser el CBD de amplio espectro, que es el que contiene todos los cannabinoides y terpenos de la planta, excepto el THC, o el que tiene niveles muy bajos de este compuesto psicoactivo.
¿Para qué sirve una crema de CBD y qué usos tiene?
Las cremas de CBD tienen diversos usos y beneficios, tanto para la salud como para la belleza. Algunos de los más destacados son los siguientes:
Alivio del dolor y la tensión muscular
El CBD tiene propiedades analgésicas y antiinflamatorias, que ayudan a reducir el dolor y la rigidez en los músculos y las articulaciones. Esto es muy útil para las personas que sufren de dolores crónicos, artritis, fibromialgia, o que realizan actividades físicas intensas. Las cremas de CBD proporcionan un alivio natural, rápido y localizado, sin efectos secundarios ni riesgo de adicción.
Tratamiento de problemas en la piel
El CBD también tiene propiedades antioxidantes, antibacterianas y seborreguladoras, que contribuyen a mejorar el aspecto y la salud de la piel. Las cremas de CBD pueden tratar diversas afecciones cutáneas, como el acné, la psoriasis, el eczema, las quemaduras solares, las irritaciones, el picor o el enrojecimiento. Además, el CBD hidrata, nutre y protege la piel, previniendo el envejecimiento prematuro y las arrugas.
Mejora de la circulación y la relajación
El CBD también tiene efectos vasodilatadores, que mejoran la circulación sanguínea y el flujo de oxígeno en los tejidos. Esto favorece la regeneración celular, la eliminación de toxinas y la prevención de la celulitis y las varices. Asimismo, el CBD tiene efectos calmantes y ansiolíticos, que ayudan a relajar el cuerpo y la mente, reduciendo el estrés y la ansiedad.
Neuropatía periférica
La neuropatía periférica es una condición que afecta a los nervios periféricos, que son los que transmiten las sensaciones y los movimientos desde el cerebro y la médula espinal hasta el resto del cuerpo. Esta condición puede causar dolor, hormigueo, debilidad y pérdida de sensibilidad en las extremidades, especialmente en los pies y las manos. El CBD puede aliviar estos síntomas, al actuar sobre los receptores de cannabinoides que se encuentran en el sistema nervioso periférico.
¿Cómo usar cremas de CBD correctamente?
El uso de las cremas de CBD es muy sencillo y seguro, solo hay que seguir estos pasos:
- Elige una crema de CBD de calidad, que tenga una buena concentración de CBD y que esté certificada por un laboratorio independiente. Puedes consultar las opiniones de otros usuarios o expertos para orientarte.
- Aplica una cantidad adecuada de crema sobre la zona afectada, y masajea suavemente hasta que se absorba por completo. El CBD llegará a los receptores de cannabinoides que se encuentran en la piel y en los tejidos subyacentes, y ejercerá su acción terapéutica.
- Repite la aplicación según sea necesario, puede ser una o varias veces al día, dependiendo de la intensidad del dolor o del problema que quieras tratar. No hay una dosis máxima establecida, pero se recomienda empezar con una cantidad moderada y aumentarla progresivamente si es necesario.
Los efectos de las cremas de CBD se pueden notar en poco tiempo, desde unos minutos hasta una hora, dependiendo del tipo de crema y de la persona que la use. No hay riesgo de sobredosis ni de intoxicación, ya que el CBD no pasa al torrente sanguíneo ni al sistema nervioso central, y no tiene efectos psicoactivos ni adictivos.
Conclusión
Las cremas de CBD son productos cosméticos que tienen múltiples beneficios para la salud y la belleza, gracias a las propiedades del CBD, un componente natural que se extrae de las plantas de cannabis. Las cremas de CBD se pueden usar para aliviar el dolor, la inflamación, los problemas en la piel, la circulación, la relajación y la neuropatía periférica. Su uso es fácil, seguro y efectivo, siempre que se elija una crema de calidad y se aplique correctamente. Si quieres probar las cremas de CBD, te invitamos a buscar un proveedor confiable y a elegir el producto que más se adapte a tus necesidades y preferencias.
