Una alternativa a la clásica pizza con salsa de tomate
La pizza vegana con puerro, cebolla y queso crema es una deliciosa opción para aquellos que buscan una alternativa a la clásica pizza con salsa de tomate. Esta versión blanca de la pizza, conocida como ‘pizza bianca’, prescinde del tomate en su base y ofrece una variedad de opciones para reemplazarlo.
En lugar de la salsa de tomate, se puede utilizar el Philadelphia Vegetal, también conocido como Vegan Philly. Este queso crema sin lácteos es ideal para personas con alergia a la soja y sorprende por su cremosidad para untar. Combinado con puerro, cebolla morada y queso mozzarella vegano, esta pizza se convierte en una opción 100% vegana y llena de sabor.
Preparación de la pizza vegana con puerro, cebolla y queso crema
Para preparar esta deliciosa pizza vegana, primero debes encender el horno a 200 ºC. En un cuenco, mezcla la harina integral, el bicarbonato sódico y una pizca de sal. Añade el yogur de soja natural y mezcla hasta obtener una masa homogénea. Estira la masa en forma redonda u ovalada sobre un papel vegetal o silpat y hornéala durante 10 minutos para que tome color y consistencia.
Mientras tanto, corta el puerro y la cebolla, y dóralos en una sartén con unas gotas de aceite de oliva a fuego medio. Una vez que estén tiernos, retíralos del fuego. En otro cuenco, diluye el queso crema con agua y orégano seco para obtener una especie de salsa de queso. Reparte esta salsa sobre la masa horneada, añade la verdura dorada y, por último, el queso mozzarella vegano por encima. Vuelve a hornear durante 10 a 12 minutos, hasta que el queso vegano se derrita y empiece a dorar. Finalmente, espolvorea perejil fresco picado por encima.
Acompañamientos para la pizza vegana con puerro, cebolla y queso crema
Esta pizza vegana con puerro, cebolla y queso crema es perfecta como plato principal. Puedes acompañarla con una copa de vino, cerveza o un cóctel sin alcohol. Para terminar el encuentro de manera dulce, puedes servir un minicrumbles con frutos rojos o un helado cremoso de chocolate y café. Esta combinación es ideal para un almuerzo o cena informal con visitas.
